Anoche tocaron mis adorados The Cure en Valencia. Esta noche en Madrid con todo el papel vendido. Y yo sin pasar envidia. Nada. Ni una poca...
Terra:
La Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia ha sido el escenario elegido para celebrar el primer MTV Winter Festival, una iniciativa que se celebrará una vez al año hasta 2012 en el complejo diseñado por Santiago Calatrava y que será emitida próximamente ante una audiencia potencial de 506 millones de personas.
El cartel elegido para esta primera edición -con entrada gratuita y donde la Generalitat ha invertido un millón de euros- se completaba con los finlandeses HIM y los estadounidenses From First to Last, que con su rock duro adolescente apenas han logrado precalentar el gélido ambiente que reinaba en el antiguo cauce del Turia, concretamente en la zona habilitada entre el Museo de las Ciencias, el Hemisféric y el jardín del Umbracle.
La banda de Robert Smith, ataviado con su clásico atuendo -camisa y pantalón negros, sombra de ojos, labios rojos y melena cardada-, ha defendido durante más de dos horas, en un escenario coronado por grandes gotas de agua, los éxitos de su carrera y temas de sus últimos discos, sin apenas presentar los nuevos que albergará su nuevo trabajo, doble y según ellos el último en formato de CD.
Así, de su álbum más aclamado por la crítica, 'Disintegration', han sonado desde 'Plainsong' -el tema con el que abren la mayoría de sus conciertos de esta gira europea que les lleva, hoy, a Madrid y el próximo lunes a Barcelona, ambos en recintos cerrados- hasta 'Pictures of you' pasando por 'Lullaby' y 'Lovesong'.
El público se ha agarrado como a un clavo ardiendo al ritmo de 'Friday I'm in love', 'Just like heaven', 'In between days', 'The walk', 'Wrong number' o 'Never enough'.
Al final, y con espectadores emigrando ya hacia lares más acogedores, la banda se ha reservado para los 'bises' varios de sus mejores temas, como 'Close to me', 'Why can't I be you?', 'Boys don't cry' -la más coreada y bailada de la noche- y 'A forest', la pieza más codiciada de su museo de ensueños, donde cabe desde el romanticismo poético hasta el sonido gótico del punk más pop.
Han sido los únicos minutos en que la inquietante, hierática y oronda presencia de Robert Smith ha dejado las guitarras para recorrer los 45 metros del escenario y acercarse levemente al público, hacia el cual apenas se ha dirigido durante todo el concierto más que para pedirle algo más de empuje y coros; un poco de calor humano, en definitiva.
El negro estético imperante en la oferta musical de The Cure contrastaba con el blanco inmaculado y las formas geométricas de los edificios de Calatrava, que ya han sido escenario de conciertos como los del festival Eclèctic con Bjork, Carlos Núñez o Miguel Bosé.
El grupo, que actuó por primera vez en Valencia en 1987, la época de sus primeros éxitos comerciales con 'Kiss me, kiss me, kiss me', disfrutó de una gran infraestructura montada para la ocasión, con una potencia de 50.000 vatios de sonido y un equipo de trescientos profesionales.
La grabación del festival será emitida próximamente en España y después en los Estados Unidos, Latinoamérica, Europa y Asia, con el objetivo de consolidar una oferta musical de trascendencia internacional en la Ciudad de las Artes y las Ciencias.
Valencia, que se prepara ya para celebrar con las Fallas sus fiestas de bienvenida a la primavera, se ha convertido así en base experimental de los festivales invernales al aire libre que ha ideado la cadena responsable de la globalización musical del planeta.
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La Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia ha sido el escenario elegido para celebrar el primer MTV Winter Festival, una iniciativa que se celebrará una vez al año hasta 2012 en el complejo diseñado por Santiago Calatrava y que será emitida próximamente ante una audiencia potencial de 506 millones de personas.
El cartel elegido para esta primera edición -con entrada gratuita y donde la Generalitat ha invertido un millón de euros- se completaba con los finlandeses HIM y los estadounidenses From First to Last, que con su rock duro adolescente apenas han logrado precalentar el gélido ambiente que reinaba en el antiguo cauce del Turia, concretamente en la zona habilitada entre el Museo de las Ciencias, el Hemisféric y el jardín del Umbracle.
La banda de Robert Smith, ataviado con su clásico atuendo -camisa y pantalón negros, sombra de ojos, labios rojos y melena cardada-, ha defendido durante más de dos horas, en un escenario coronado por grandes gotas de agua, los éxitos de su carrera y temas de sus últimos discos, sin apenas presentar los nuevos que albergará su nuevo trabajo, doble y según ellos el último en formato de CD.
Así, de su álbum más aclamado por la crítica, 'Disintegration', han sonado desde 'Plainsong' -el tema con el que abren la mayoría de sus conciertos de esta gira europea que les lleva, hoy, a Madrid y el próximo lunes a Barcelona, ambos en recintos cerrados- hasta 'Pictures of you' pasando por 'Lullaby' y 'Lovesong'.
El público se ha agarrado como a un clavo ardiendo al ritmo de 'Friday I'm in love', 'Just like heaven', 'In between days', 'The walk', 'Wrong number' o 'Never enough'.
Al final, y con espectadores emigrando ya hacia lares más acogedores, la banda se ha reservado para los 'bises' varios de sus mejores temas, como 'Close to me', 'Why can't I be you?', 'Boys don't cry' -la más coreada y bailada de la noche- y 'A forest', la pieza más codiciada de su museo de ensueños, donde cabe desde el romanticismo poético hasta el sonido gótico del punk más pop.
Han sido los únicos minutos en que la inquietante, hierática y oronda presencia de Robert Smith ha dejado las guitarras para recorrer los 45 metros del escenario y acercarse levemente al público, hacia el cual apenas se ha dirigido durante todo el concierto más que para pedirle algo más de empuje y coros; un poco de calor humano, en definitiva.
El negro estético imperante en la oferta musical de The Cure contrastaba con el blanco inmaculado y las formas geométricas de los edificios de Calatrava, que ya han sido escenario de conciertos como los del festival Eclèctic con Bjork, Carlos Núñez o Miguel Bosé.
El grupo, que actuó por primera vez en Valencia en 1987, la época de sus primeros éxitos comerciales con 'Kiss me, kiss me, kiss me', disfrutó de una gran infraestructura montada para la ocasión, con una potencia de 50.000 vatios de sonido y un equipo de trescientos profesionales.
La grabación del festival será emitida próximamente en España y después en los Estados Unidos, Latinoamérica, Europa y Asia, con el objetivo de consolidar una oferta musical de trascendencia internacional en la Ciudad de las Artes y las Ciencias.
Valencia, que se prepara ya para celebrar con las Fallas sus fiestas de bienvenida a la primavera, se ha convertido así en base experimental de los festivales invernales al aire libre que ha ideado la cadena responsable de la globalización musical del planeta.
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